Buenos días a quién esté leyendo esto. Como prometí, aquí estamos con esta primera entrada hablando un poco de lo que llega este otoño. Esta entrada va a ser del segundo tipo que comenté en la entrada de presentación, siendo un poco un popurrí hablando de varios animes. Podréis leerlo tranquilo, ya que en esta ocasión evitaré los spoilers. Dividiré esta entrada en 3 bloques. En el primero comentaré por encima las series a las que ya les cayó el drop y un poco por qué, aunque ya os adelanto que la razón principal es aburrimiento. En el segundo hablaré de los animes que más me han motivado por ahora, porque no todo tiene que ser negativo. Y para terminar, diré qué series de las que terminaron en verano considero que merecen la pena si no las habéis visto. Sin más, empecemos.
PERO ESTO QUÉ ES
Vamos con esos ricos drops, cuyo punto en común en su mayoría es… que me aburrieron. Dos cayeron con el primero capítulo, Mecha-Ude y Haigakura. El primero me dio la sensación del típico shonen de peleas que apela al espectro más joven del público, sin mucha chicha. El segundo me dio la sensación de estar leyendo el inicio de un gacha cutre, más interesado en ofrecer muchachos que alegren la vista que en contar una historia.
En su segundo capítulo se fueron a la papelera dos fantasías genéricas que tampoco consiguieron ganar mi interés. Sayonara Ryuusei, Konichiwa Jinsei es la típica historia de ser ultrapoderoso reencarnado con pinta de que se le formará un harén alrededor. Sin ser tampoco erótico, me dio la sensación de que acabaría siendo un catálogo de fetiches medio furros. Y Party kara Tsuihou sareta Sono Chiyushi, Jitsu wa Saikyou ni Tsuki es del grupo de prota infravalorado que resulta ser un supercrack, pero ya la base es absurda (como puede ser sanador si solo puede usar un hechizo y ni siquiera a lo bestia) y tras dos capítulos de nada y bostezos decidí pasar página. Tampoco pasó del segundo capítulo Puniru wa Kawaii Slime, en este caso porque siendo una comedia absurda, no me entró casi ningún chiste de los dos primeros capítulos y ni siquiera me han caído bien ninguno de los principales, por lo que decidí descartarla.
Y hasta el tercer capítulo llegaron las dos últimas series que voy a comentar por aquí, de primeras diferentes pero que comparten el hecho de ser un harén. Amagami-san Chi no Enmusubi es una romcom con un punto picante, con el prota “obligado” a escoger esposa entre tres hermosas hermanas, pero para mí al menos me parece que con quien va a acabar el prota es bastante obvio, y si eso se une a que tampoco es un género que me haga especial gracia, tampoco me daban muchas ganas de continuar. El último drop (al menos por ahora) es Hitoribocchi no Isekai Kouryaku, isekai de corte humorístico con un prota que es transportado con toda su clase y que su plan de triunfar en solitario se le va al traste cuando todas sus compañeras se le acaban acoplando. Al principio no estaba mal del todo, pero cuando todo se reduce al prota teniendo que hacerlo todo porque las chicas no saben/quieren/pueden, unido a un dibujo y una animación mediocres, pues como que no me apetece continuar.
ESTO YA ES OTRA COSA
Ahora vamos con las cosas que sí parecen bastante digeribles. Empezamos con Chi.: Chikyuu no Undou ni Tsuite para abrir boca. Es una ficción histórica ambientada en la Edad Media europea centrada en las penurias para conseguir demostrar la teoría heliocéntrica, en contra de la doctrina geocéntrica mayoritaria y de la opinión de la Iglesia Católica. Empezamos en la Polonia del siglo XV y ya en el tercer capítulo hay un giro que no me esperaba para nada. Enganchadito me tiene.
Otra que me ha enganchado desde el primer momento es Trillion Game. Básicamente es un anime ambientado en el mundo de las start-ups con un caradura con suficiente labia para vender neveras a los Inuit y un talento informático con cero don de gentes que se unen para fundar una empresa con el objetivo de tener una valoración de un billón de dólares (lo que viene siendo un trillón para los anglosajones). Bastante loca en lo mostrado por ahora.
Un tono totalmente diferente tiene Kekkon Suru tte, Hontou desu ka. En este caso tenemos a dos trabajadores en una agencia de viajes. Ninguno de los dos tiene don de gentes, y a ninguno de los dos les apetece ir a Alaska, donde su empresa va a abrir una sucursal y ha anunciado que va a mandar a alguien de su oficina como gerente. Pero como preferentemente el elegido o elegida será alguien soltero, deciden fingir que se van a casar para librarse del marrón. No es una comedia romántica revolucionaria, pero me ha gustado bastante lo que he visto por ahora y las personalidades de ambos protas.
Y de paso recomendar también Ao no Hako, Dan da Dan y Kabushiki Gaisha Magi Lumiere, que leo sus respectivos mangas y y están muy bien. No voy a comentar mucho más porque prefiero hacerlo con lo que me pillas de nuevas salvo casos extremos para bien y para mal, pero probablemente se cuelen comentarios en próximos post.
PENA QUE SE HAN TERMINADO
Pues sí, una pena que estas cuatro series hayan terminado porque me hubiera gustado continuar viéndolas. La primera de ellas es The Fable, serie de 25 capítulos que empieza como una comedia de contrastes de un sicario al que obligan a vivir como una persona normal durante un año, con la prohibición absoluta de matar, y que se acaba convirtiendo en un thriller de yakuzas con situaciones jodidas y bastante crudas. A nivel de trama, personajes y ritmo es cojonuda, pero está lastrada con una animación más bien floja, se ve que no debía tener mucho presupuesto. De todas maneras, merece mucho la pena.
La segunda que quería mencionar es Karasu wa Aruji wo Erabanai. Es un anime de fantasía protagonizado por yatagarasu, cuervos de 3 patas que se pueden transformar en humanos. En esencia, es un anime centrado en misterio e intrigas palaciegas que se cuece a un ritmo muy lento y que te acaba dejando con ganas de mucho más. Hay que darle paciencia al inicio, eso sí, pero tanto el dibujo como la animación ayudan bastante. Ojalá anuncien una segunda temporada.
La tercera va por otros derroteros totalmente diferentes. VTuber nanda ga Haishin Kiri Wasuretara Densetsu ni Natteta es una comedia salvaje y brutota que nunca tienes claro por donde te va a sacar el siguiente chiste. Mucho chiste guarro que entra como dios, personajes con mucha química entre ellos, referencias mil. Tiene un capítulo basado en el Among Us que es gloria bendita. Diría que saqué hasta un poco de abdominales con ella. Divertidísima.
Y para terminar otro giro de tono con Gimai Seikatsu. Cuando vi que su argumento era “chico y chica adolescentes que un día se convierten en hermanos al casarse la madre de ella con el padre de él” pensé que iba a ser un instadrop porque me encontraría un festival fetichista… y para nada. Es un anime que se cuece a un fuego muy lento, sin fetichizar, con los protagonistas teniendo en su cabeza en todo momento las cuestiones morales de lo que van sintiendo y aunque el final no es del todo satisfactorio, la verdad es que me vale. Es una de las sorpresas más gratas de este año.
Y también mencionar el excelente trabajo que hicieron en la segunda temporada de Oshi no Ko, en la que además de adaptar mi arco favorito, tiene varios capítulos que son puro arte y por sí solos, sin más contexto, son una auténtica maravilla.
Y CON ESTO Y UN BIZCOCHO
Bastante larga es la entrada ya como para seguir enrollándome. Hay mucho más anime esta temporada del que no he hablado, tanto entre lo que ya me ha convencido para seguir como entre lo que está en la cuerda floja, pero eso ya sería material para siguientes posts, posiblemente para la semana que viene, que estoy motivado. Nos leemos entonces.